El plan para reducir las inundaciones, en el que participan Santander, la Fundación Naturaleza y Hombre y el Instituto de Hidráulica, aspira a una subvención del Ministerio para la Transición Ecológica para sufragar el 95% del presupuesto
La ampliación de la Marisma de Alday que ha planificado el Ayuntamiento de Camargo para reducir el riesgo de inundaciones de aquí a los próximos años costará 4,2 millones de euros en total. Sin embargo, el Consistorio aspira a poder sufragar un 95% de este importe mediante una subvención de la Fundación Biodiversidad F.S.P. del Ministerio para la Transición Ecológica del Gobierno de España. Así lo ha comunicado hoy el equipo de gobierno, respaldado de manera unánime durante el Pleno extraordinario celebrado este lunes para dar a conocer nuevos detalles de este proyecto. ‘Marisma de Alday: Un humedal protector’, como la han bautizado en el municipio, es una ambiciosa iniciativa para recuperar espacios del lagunar y mejorar así su almacenaje de agua durante las precipitaciones más fuertes. La idea es aumentar la capacidad del ecosistema para que, en caso de temporales, sea éste -y no las zonas urbanas- el que pueda cargar con las lluvias más intensas. Para ello, aunando la mirada administrativa, la ambiental y la investigadora, el equipo de gobierno ha logrado contar con la colaboración del Ayuntamiento de Santander, la Fundación Naturaleza y Hombre (FNyH) y el Instituto de Hidráulica Ambiental (IH).
«Solucionar un gran problema como es el de las inundaciones cuando se producen lluvias torrenciales». Ese es el gran objetivo que se ha propuesto la alcaldesa de Camargo Esther Bolado durante la presentación de la iniciativa, orientada tanto al incremento del volumen en este humedal como a la reducción de especies invasoras, la reforestación o la ampliación del uso público en la zona, entre otras metas. Los objetivos de la actuación, de la que también están al corriente en la Autoridad Portuaria de Santander y las consejerías del Ejecutivo regional, no podían estar más en línea con los de la convocatoria del Ministerio, específicamente enfocada a la reducción de los riesgos de inundación en los entornos urbanos. Está hecho «a medida», como ha declarado durante el Pleno el concejal de Desarrollo Local, Eugenio Gómez, optimista de cara a la admisión de la subvención.
Camargo quiere aumentar en más de 200.000 metros cúbicos el volumen del humedal, 117 hectáreas útiles orientadas a reforzar la capacidad de este ecosistema durante las lluvias. Una de las grandes motivaciones que han acelerado el diseño del plan tiene que ver con las grandes inundaciones registradas que, entre diciembre de 2020 y enero de 2021, afectaron a Camargo y Santander en las inmediaciones de la Marisma de Alday y la Ría de Raos, entre otros lugares mal parados. Ya entonces el Instituto de Hidráulica realizó un estudio de inundabilidad, del cual emanan algunas de las actuaciones esbozadas en este plan polifacético.
Porque no todo tiene que ver con las inundaciones. Aprovechando esta iniciativa, el Consistorio se ha propuesto darle un lavado de cara y mejorar el entorno en todas sus facetas, desde la introducción de nuevo arbolado autóctono, con alisos, sauces, fresnos, avellanos, laureles y madroños; la eliminación de especies invasoras, como la ‘Ficopomatus enigmaticus’, una especie de gusanos capaz de general problemas de desagüe; y la promoción del uso público de la zona, mediante la ampliación del sendero de la Marisma de Alday, conectando las zonas actuales con el espacio recuperado y acondicionando y señalizando un camino que recorra toda la zona de actuación.